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El empresario venezolano Constantino Bonaduce, presidente de Aerocentro parque industrial, apuesta a la reapertura econĆ³mica y estĆ” empeƱado en realizar alianzas con socios del Brasil
Hablar de desarrollo sin mencionar a Brasil resulta difĆcil, el llamado gigante amazĆ³nico es vecino de Venezuela y desde tiempos inmemoriales ambos paĆses mantienen una estrecha relaciĆ³n cultural, econĆ³mica y comercial, afirma el Constantino Bonaduce, presidente del Parque Industrial Aerocentro, conglomerado ubicado en Barcelona estado AnzoĆ”tegui, donde convergen una diversidad de portafolios.
Para nadie es secreto que Brasil estĆ” entre los paĆses con uno de los niveles de industrializaciĆ³n mĆ”s avanzados del mundo. Se trata de la dĆ©cima economĆa mĆ”s grande del planeta que en 1999 rebasĆ³ los $EE.UU550 millones dado su pujante desarrollo industrial en sectores como el textil, alimentario, minero, servicios, electrodomĆ©sticos, manufacturero, entre otros. Consciente de esta realidad, el empresario Constantino Bonaduce, intenta estrechar vĆnculos con sus pares brasileƱos que deseen expandir sus negocios, poniendo a disposiciĆ³n las naves del Parque Industrial Aerocentro, un novedoso espacio que ofrece excelentes ventajas al contar con instalaciones Ć³ptimas para facilitar todo tipo de operaciones atendiendo a estĆ”ndares internacionales establecidos para estos conglomerados, asĆ como excelente ubicaciĆ³n.
Bonaduce invita a los empresarios ubicados al noreste de Brasil, a que se atrevan a expandir sus Ć”rea de influencia accediendo al mercado colombiano y del Caribe, pero utilizando a Aerocentro parque industrial, el cual dispone de todas las bondades de estos conglomerados incluido un hotel boutique, el aeropuerto internacional a escasos metros y un puerto de aguas profundas a sĆ³lo minutos, como es el puerto de Guanta.
La distancia que separa a RĆo de Janeiro de ciudades como Pernambuco o Manaos por ejemplo, es de unos 3 mil km- lo que hace atractiva la ruta Manaos-Venezuela- Colombia y paĆses del Caribe, no sĆ³lo porque se acorta sustancialmente el tiempo de viaje, sino tambiĆ©n porque la movilizaciĆ³n de carga, por vĆa terrestre no implica un gasto fuerte por uso de combustible, al contrario, los costos por este concepto son casi imperceptibles.